Porque lo prometido es deuda y porque mi madre me lo ha recordado, aquí está la ansiada segunda parte de mis anécdotas con la casa.
Aunque aún sigo estudiando, a pesar de que sea a distancia (amo mi país y sus facilidades para estudiar en la universidad), no me considero una ''estudiante''. Yo trabajo y vivo de mi propio dinero, lo cual hace que empieces a preocuparte por otras cosas aparte de dónde hay una discoteca, cuánta gente joven hay en la zona donde vives, hasta que hora están abiertos los bares, etc. Empiezas poco a poco a tener preocupaciones del tipo: cuánto cuesta la entrada de la discoteca, cuánto cuesta cada bebida y si no me sale más barato comprarme una botella en el super y cogerme la cogorza del siglo por un precio menor, cuánta gasolina necesito, si choco en el camino, a cuánto ascenderá la reparación (si te chocas contra la flora, no te lo cubre el seguro...), hasta qué hora puedes quedarte para poderte recuperar antes de volver a trabajar. Todas esas cosas que hacen de ti, tristemente, una persona ''mayor''. Y con mayor me refiero a la edad en que se supone que deberías ser piloto de avión, bailarina, cantante o actriz. A ese tiempo que cuando eres un niño imaginas con tanta ilusión y en el que, en realidad y cuando ha llegado, sueñas con cosas como que el mes que viene voy a cobrar 50€ y no voy a poder pagar mis facturas.
Lo último es verdad. No sé si se debe a que yo estaba muy nerviosa o excitada cuando hablé con mi jefe sobre el contrato y todo lo que debía saber, pero de alguna manera, a mí me parecía subrrealista que trabaje o no trabaje, siempre cobro lo mismo. La cosa es tal que si no hay clientes y el hotel cierra un mes, a mí me pagan igualmente las horas que tengo en el contrato. Claro que el hotel está de media en invierno, de forma no consecutiva, cerrado unos dos meses más o menos. En esos momentos piensas: Le habré entendido correctamente? El mes que viene me ingresan todo ese dinero, aunque sólo he trabajado tantos días? Entonces te alquilas la casa, te vas a ikea, te vuelves LOCA! Lo compras todo, lo montas en tu cuarto, intentas transportar un colchón gigantesco en un coche ridículo... y lo consigues, subes el colchón por las escaleras (Tienes unas contracturas por haber hecho boxeo con el colchón que te duele la brisa en el cuello), te acuestas a dormir y luego piensas: y si no me pagan? qué hago? lo devuelvo todo???? cómo voy a vivir!!!???
Después de sobrevivir a la diarrea nerviosa que te ha entrado (a mí me da por eso, a otros por comer o llorar, cada cual es un mundo...), te tranquilizas porque SÍ que has cobrado lo que tú creías haber entendido. Te permites el lujo de pagar toda la fianza del piso sola porque la que va a ser tu compañera te ha dicho que no tiene mucho dinero pero que en breve te pagará. Te lo crees.
Fallo número 1: Si era bastante sencillo decir ''hasta que no pagues, no puedes vivir aquí'' por qué dije ''no paaaaaasa naaaaada, si tienes alguna dificultad económica, dímelo y lo solucionamos juntas''?
Sin darme cuenta, me metí a vivir con una chica que, en palabras de mi hermana Alicia, quería vivir la ''experiencia universitaria''. Lo cual no tiene sentido porque ella si que no estudia absolutamente nada, ni quiere. Ella dice que sí... pero creo que con 24 años que tiene no sabe aún que es un poco tarde para decir ''yo de mayor...''.
Lo de la experiencia universitaria me lo explicó mi hermana y a mí me pareció exactamente lo mismo que lo que esta chica quería hacer, e hizo. Consiste en lo siguiente:
-
Vives del cuento y del dinero de otro. En este caso, el dinero es propio, pero a la velocidad que se lo gasta cuando le llega a la cuenta, cualquiera diría que no le ha costado nada conseguirlo.
-
Pernoctas en un piso pequeño con poquísimas cosas importantes y millones de tonterías. Nuestra casa es normalita, tirando a pequeña. Ella consideró más importante comprarse una mantequillera (dísese del recipiente en el que guardas la mantequilla pero, acaso la mantequilla no viene ya a veces en un recipiente? Artilugio inútil número 1), una botella para el aceite (aunque el aceite lo compras de hecho ya en una botella. Artilugio inútil número 2), un azucarero (aunque ya teníamos uno que yo había comprado por un euro, que es la máxima suma que doy por tonterías de ese tipo. Artilugio inútil número 3), a comprarse una cama.
El asunto es que le tuvo que pedir dinero a una conocida suya para poder comprarse la cama, la cual pagó por una burrada de dinero que da miedo... Te digo una cosa, la que uso ahora es mi primera cama comprada de mí para mí y la pagué en ikea menos de 20€. Es perfecta y maravillosa y no se le caen los tornillos ni le pasan cosas raras, como a la de ella. Moraleja del día: barato no significa siempre malo. La cuestión es que por 20€, si de aquí a cinco meses, la cama se estropea, me compro otra xD
Con el dinero que ella pagó, puede comprarse MUUUCHAS camas como la mía. Pero no le pide el dinero a la señora esa para pagarme la fianza, nooooo. Para una cama, y nótese que hablo de CAMA, no de colchón. Y con esto vamos al siguiente punto...
-
Tu nevera parece la de una familia numerosa a final de mes. Eso es típico universitario. No tienes nada de comer, pues pizza! kebab! McDonald's!... lo que sea. Pero en tu nevera sólo hay un queso mohoso, jamón cocido que va a salir corriendo por sí mismo en cualquier momento y un tomate viejo como una pasa que te obligaste a comprar para ''comer sano''. Y así sería su nevera si no la compartiéramos.
Ella no tenía coche y el super del pueblo no le parecía lo suficientemente bueno, así que en principio compartíamos la comida, aún y cuando todo lo había comprado yo. Luego íbamos a hacer la compra juntas y a medias, lo cual fue un error garrafal, es más...
Fallo número 2: Dejarse engatusar para comprar a medias cosas que tú, ni comes ahora, ni has comido en tu vida.
Continúo. Lo bonito es haber comprado un lunes 10 tomates y decir el jueves: voy a comer ensalada! Sabes qué no hay?? Tomate. Cómo puede ser? Había diez! Significa que se ha comido entre tres y cuatro tomates al día... no se percató de que a lo mejor yo también quería comerme lo que había comprado? Pues no... y como yo no quería ser pesada y no sé... a lo mejor no compramos tantos tomates como yo creía, lo habrá hecho sin darse cuenta (<-- Éste será mi pensamiento favorito durante los próximos meses de convivencia. Lo diré TODO EL TIEMPO)
-
En tu super mini piso tiene que haber siempre fiesta constante. Es una cosa de la ''experiencia'', que si duermes o estudias, te pierdes lo bueno de los mejores años de tu vida, Mónica vamos allá, o allí, o a otro tanto más lejos... eso es lo único que salía de su boca todo el tiempo. Ahora tiene coche y lo más lejos que va es al super. Interesante.
Lo gracioso es que me dejaba convencer e íbamos. Lo que pasaba allí a donde fuéramos era interesante. Ella no dejaba de insistir en que me iba a buscar un chico genial. A ver, yo tengo novio y ella no... es algún tipo de broma barata? Ella no puede encontrarse uno para sí misma pero a mí sí que me lo va a encontrar. Aún y cuando yo no lo necesito ni lo quiero. Mis palabras se pronuncian en vano porque ella está en busca y captura del tio más ''fos'' de todo el local. Me lo encasqueta de mala manera y yo consigo quitármelo de encima con paciencia y de buen modo, no sin anter dejar que me pague una bebida (fascinante la de copas que te pagan los demás aquí... en España no me había pasado nunca. Somos un país de rácanos!) Entonces ella lo sigue intentando e intentando e intentando. Ella insiste en que todos los hombres que me miran es porque están enamorados de mí... ejem. No será que llevo tacones (no es usual por la zona, al parecer), vestidos bastante cortos (en este país la gente es muy estrecha y si se te ve la pantorrilla, ya es corto) y sonrío todo el rato (lo cual deben entender como que estoy de psiquiátrico porque aquí la gente NO es feliz y si tú eres feliz es raro... no tiene sentido jajajjaa). Yo considero que es normal que me miren. Se verá aún más claro con el siguiente símil: Están un grupo de ''amo a Laura'' reunidos en un local y de repente entra una stripper. Sea guapa, fea, gorda, bajita, da igual.
Todos la van a mirar con descaro. Pues esto, lo mismo.
Pero para todo hay un límite. Y ella llegó a él, se miraron a la cara y ella pasó la raya descaradamente.
La última vez que fui con ella a una discoteca, el segurita de la puerta se puso a hablar con nosotras. No voy a decir que no. Parecía que yo le gustaba. Pero... y? Era un tipo soso y simpático a ratos. Nada espectacular ni digno de recordar. Si no fuera por la experiencia horrible de la que fue protagonista.
Yo escuché a mi compañera decir algo de un desayuno, nada, ni le presté atención. Y tooooodo el camino a casa diciendo: qué guapo, eh? qué buen tipo, eh? y es ruso... los rusos tienen mucho dinero y compran muchos regalos... Lo que ella no pilló fue mi silencio en plan: pero de que coj**es estás hablando, colega?? Del rubio desgarbado y feo, con pelos en la nariz, sentido del humor cero y una risa bobalicona? No debemos estar hablando de la misma persona,.. Le dije: te gusta? parece que te gusta... te pega mucho.
Noooooo... para ella no, para mí. Para mí que ya tengo un novio divino y maravilloso (imagino que él leerá esto algún día y así con palabras lindas se le olvida que hablo de cómo salíamos con chicos... xD), con sangre en las venas, como buen latino. Ella quería que yo cambiase a mi novio por un nórdico bobalicón y blandito... ya... algunos tienen tanta imaginación que me extraña que no los hayan fichado para Walt Disney.
El caso es que llegamos a casa y nos acostamos a dormir. En menos de una hora, suena el timbre. No parece haber movimiento así que deduzco que la encargada de abrir la puerta soy yo (nótese que debían ser las cinco de la mañana y yo trabajaba a las doce). Quién está ahí? El nórdico desgarbado y bobalicón, es decir, el segurita ruso. Oh!? Mi sorpresa era tal que no atiné a decir absolutamente nada. Entonces él dice que ELLA le había invitado a desayunar (de ahí lo que yo había oído lejanamente...) pero... CONMIGO! Que YO quería conocerle y le dio nuestra dirección para que viniera después de trabajar. Le dije que se habría confundido. Que no podía entrar y que era increíble que ella hubiera hecho algo así. El chico se fue contrariado aunque rojísimo de la vergüenza. Algo de lo que dije debió ser un poco brusco, seguramente pero... es una situación que no hubiera esperado jamás!!! y yo a menos de seis horas de empezar a trabajar y medio borracha. Intolerable de cualquier modo! Aún así, no le dije sino que era demasiado estúpida. Ella se lo tomó a broma. Vaya por Dios. (Lo habrá hecho sin querer... xD)
En general, debo decir que ella siempre me deja en ridículo delante de la gente. Cada vez que ve a un chico parece una gata en celo, así de fuerte lo digo, porque así de fuerte es. Vamos a un bar y liga tan agresivamente con el camarero (con agresivamente me refiero a que es muy exagerado y además muy poco deseado por el pobre camarero. Sin contar que sus artes para ligar son como en la prehistoria... sólo le falta una porra y arrastrar al pobre chico por el pene hasta su cueva) que me veo obligada a darle mogollón de propina y disculparme con la mirada por tener una compañía tan maleducada.
También fuímos a una heladería donde fue tan horrible que le prometí que conmigo no iba a volver a ir a comer helado nunca jamás a ese sitio.
Eso sin contar que hace unas semanas se mudaron una pareja a la casa de enfrente y según nuestro vecino, el chico es soldado. Ella se pusó de buscona en la ventana mientras decía cosas como que la novia era muy fea y que ella era mejor. Aparte de lo obvio, que es que ella parece un ''cochino en día de fiesta'', según mi novio, a qué viene esa manía suya de intentar tener todo lo que no puede tener?
Desde que trabaja en el hotel en el que yo también trabajo, ha ido saltando de cama en cama, cual juego de la oca (y me lo tiro, porque me toca jajaja). Ahora está medio atontada por un compañero nuestro con el que se ha acostado varias veces, a pesar de que éste está casado desde hace poco y que desde hace un par de días se ha convertido, además, en papá (qué monada!). La cosa es que ella había salido con él antes de él casarse y ella lo había rechazado porque... fos! ése no le gustaba... Ya... pues ahora sí que le gusta. No hace más que decir que la mujer es una interesada, que sólo le quiere por los papeles, blablablá. Quizás sí, quizás no. Desde luego, lo que no va a hacer el chico es dejar a la monada de chica que tiene para estar con una tía de metro y medio con cara de cerdo (y... cuerpo también), maleducada, respondona, pedante y mala tipa en general. Que, por si no fuera suficiente, ni siquiera sabe lo que quiere. Ahora le quiere a él, pero cuando le tenga, qué? le seguirá deseando? Lo dudo... es una ''culo veo, culo quiero'' me parece a mí.
Qué horror! Me desvío mogollón de lo que quiero contar! Me voy por las ramas y no acabo de contar nada.
Como mi madre bien dice: Si no tienes dinero (o lo tienes pero no lo quieres dar), no puedes independizarte.
Sabias palabras. Son ciertas al cien por cien. Vivir solo requiere tener un poco de dinero. No hace falta ser rico, pero para cosas básicas siempre tienes que tener!
La historia de cómo llegué a sacar de quicio a mi compañera es la siguiente:
Ya conté cómo se le quedó la cara cuando le pedí el dinero de la fianza, y la cara de ano que puso cuando le dije lo de las facturas. Pues además de que ya no compramos a medias y que yo estaba empezando a no tener ni un pelo de tonta, pues ella se iba enfadando. Anque si lo piensas bien, ella se enfadó porque yo ya no me dejaba utilizar!
La siguiente cosa que le molestó muchísimo y que se negaba a creer es la historia con la aspiradora.
Yo compré una aspiradora y una escoba y una pala y una escobilla y un cubo de fregar y una fregona y los productos de limpieza y el microondas y la lavadora y la barra americana de la cocina con los taburetes y la alfombra de la cocina y el jabón del lavaplatos y la lavadora y el mueble del cuarto de baño y la papelera y, y, y, y... Es decir, yo compré todo lo comprable que no venía con la casa y que uno necesita para vivir solo.
Pero todo era mío. Lo pagué yo y era mío. Yo LE DEJABA usarlo todo. Pero era mío. Y ella insistió en que podría pagarme la mitad... pero claro que no! si no me había pagado la fianza, si no se había comprado su propia cama, cómo iba a pagar tanta cosa?
Cuando me dejó de hablar porque... cuál era la razón por la que ella estaba tan enfadada?? AH! sí... porque había tenido que pagarme su mitad correspondiente de las facturas en el momento apropiado para ello y no cuando a ella le daba la gana. Entonces me dejó de hablar en casa y en el trabajo. E hizo que sus compañeros mas cercanos a ella no me hablasen tampoco. No sé qué les habrá contado a ellos en ese momento pero... no creo que fuera la verdad... si no, como mínimo, se hubieran burlado todos de ella por tonta.
La cosa es que yo quité la aspiradora de la cocina y la puse en mi cuarto, porque no me apetecía casi nunca subirla hasta mi cuarto para volverla a bajar y porque en realidad la finalidad de la aspiradora era limpiar la moqueta de mi cuarto. Si no tuviera moqueta en el dormitorio, no tendría siquiera aspiradora. Entonces está claro, no? Yo cogí MI aspiradora que yo había puesto en un lugar, digamos, de uso común para que me quedase más cómoda para limpiar mi cuarto, que es el fin por el cual había sido adquirida. Pues bien, un día cualquiera de odio polaco hacía mí, ella sube las escaleras decidida y de mala hostia, aunque con un tono suave, como siempre que me quiere pedir algo, y me dice que le dé la aspiradora. Mi respuesta fue un simple pero seguro ''no''. Ella no lo pilló y me dijo que le diese la aspiradora que era para limpiar el baño, o el salón, ni idea... ya ni me acuerdo... pero vamos, que no era para su cuarto, era para una zona común.
Yo no me bajé del burro y le dije: por qué? no se puede barrer ahí?
La cara es tan indescriptible... en serio. No había sido capaz en todo ese tiempo de cantarle las cuarenta y, de repente, saco fuerzas de donde no hay y le niego algo tan básico para ella. Aunque viendo cómo la pasa, se podría decir que no ha tenido una en su vida.
Bajó horrorizada por mi respuesta y no me volvió a pedir la aspiradora nunca más... buena chica!
Pero a lo que íbamos... Me pregunta que si se tiene que buscar otra casa y yo le digo que sí, que será lo mejor para todos. No cabe en sí del asombro. No se lo esperaba. Imagino que había venido a soltar esa bomba pensando que la antigua Mónica le iba a decir: noooo, cómo dices eso? claro qu eno... no seas boba....
Pero la nueva Mónica es más segura, menos mangoneable y tiene muy mala hostia si se juega con su dinero. La nueva yo le dijo que sí, que se lo buscara.
Ella incluso, minutos antes había subido a preguntarme si ese sábado podía llevarla a la ciudad a buscar un paquete de su madre a las siete de la mañana. Le dije que creía que no... que el viernes trabajaría como mínimo hasta las tres o cuatro de la madrugada. Era imposible, yo tenía que dormir. Aunque todo esto yo no lo dije muy segura de mí misma y ella lo notó. Así que lo volvió a intentar (lo que ella no sabía es que cuanto más intentara convencerme, más me cabrearía yo) y me dijo que íbamos a Trier y ya luego yo venía y me acostaba de nuevo a dormir. Le dije que no, que era una paliza muy grande eso y que no se lo iba a prometer, porque no iba a ser capaz de hacerlo. Me lloriqueó que si no, tendría que esperar otra semana más. Y le dije que cogiera la guagua. Se fue y lueeeeeego es que vino la frase esa de buscarse algo nuevo para vivir.
Luego se puso a llorar. Me dijo que era increíble que yo me negase a llevarla, que ella lo haría por mí. Que es un favor y que si no se lo hago, pues que no le pida jamás ningún favor a ella.
Ahí me puse un poco altiva y le dije que yo no necesitaba favores de nadie y menos de ella. Que no había NADA absolutamente que ella pudiera hacer por mí que no pueda hacer yo sola. Que no la necesito y que no la había necesitado en todo este tiempo de convivencia.
Se enfadó muchísimo. Pero mucho, mucho.
Mi problema es que luego, tiempo después me dice cosas y a mí me da lástima ser tan dura y le digo cosas como: busca algo, pero con caaaaalma, si dura todo el verano la búsqueda de piso nuevo, pues que dure, que no importa. Cuando en realidad lo que yo quería decirle es que se busque una mierdecilla que pueda pagar en el espacio de tiempo más breve posible. Pero yo no suelo decir lo que pienso casi nunca, me equivoco y luego no puedo rectificar tanto... si no va a parecer que soy bipolar xD
Se supone que ella desde febrero busca casa. Yo veo millones de casas en el periódico todos los días y ella parece no encontrar ninguna... estaría alargando el tiempo a ver si a mí se me pasa.
...aunque eso no ha pasado, ni va a pasar...